5 consejos para aplicar en tu día a día con quienes más amas.

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A menudo solemos dar por hecho la presencia de amigos y familiares en nuestra vida. Pero… ¿Qué pasaría si el día de mañana no estuvieran con nosotros? ¿Estaríamos satisfechos del tiempo compartido con ellos? ¿Nos arrepentiremos de algo? No esperes a que la incertidumbre del mañana te sorprenda, es momento de ser agradecido no solo por lo que tienes sino también por aquellos que te rodean, es por eso que hoy queremos darte 5 consejos para aplicar en tu día a día con quienes que más amas:

1. Aprende a escuchar.

La comunicación es lo más importante en una relación. A veces solemos llevarnos el protagonismo en la conversación y no generamos el espacio para que quienes nos rodean, se sientan escuchados, comprendidos y valorados.

2. Crea momentos únicos y valora el tiempo.

El tiempo es nuestro único recurso irrecuperable. Por eso, debemos valorar y saber utilizar el tiempo que pasamos con nuestros seres queridos, no postergar planes o salidas con familiares o amigos. El tiempo invertido en cultivar relaciones es de gran valor.

3. Brinda amor a través de tus palabras.

Vivimos en una sociedad muy apática donde nos acostumbramos a brindar amor con palabras sólo en fechas especiales y por mensajes de texto. No permitas que la cultura de ahora te quite la oportunidad de ser especial antes que sea demasiado tarde.

4. Cultiva tus relaciones con detalles.

Además de los detalles que se pueden presentar de forma material, ser detallista también es preguntar por temas que sabemos que son importantes para nuestros seres queridos. Esta actitud en particular les hará saber que son importantes para nosotros.

5. No dejes que el rencor te aleje de las personas que amas.

Cualquier tipo de relación es difícil de llevar, todos somos diferentes y debemos aprender de ello. No permitas que situaciones difíciles te hagan perder el contacto con aquellos que realmente son importantes en tu vida, aprende a perdonar. Esto no significa condonar o perdonar a la persona que te hizo daño. Significa que has dejado ir tu propia ira y resentimiento, lo que liberará tu corazón para amar de nuevo.

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