La importancia de vivir con conciencia ambiental y actuar frente al impacto que como humanidad ejercemos sobre el planeta, ha generado consigo la implementación de nuevas tecnologías en diversos sectores para el aprovechamiento de los recursos. Es así como el sector funerario también se ha sumado innovando con productos que buscan ofrecer alternativas ecológicas para la despedida del ser querido por medio de las urnas biodegradables.
Asumir una conciencia ecológica ha trascendido más allá de la moda para pasar a ser un estilo de vida en todos los frentes, incluso en el momento del fallecimiento.
Las urnas biodegradables, ofrecen una degradación limpia y mucho más corta. Un proceso en el que las cenizas se integran con la naturaleza al convertirse en materia prima útil y amigable con el medio ambiente, aportando nutrientes al suelo y facilitando el desarrollo de especies vegetales; lo que permite resignificar la muerte, honrando la memoria del ser querido en un lugar lleno de naturaleza, tranquilidad y paz.
También existen urnas diseñadas para biodegradarse en agua sin afectar el ecosistema. Lo anterior, de acuerdo con la reglamentación de cada país para la disposición de este tipo de urnas.
¿Cómo son las urnas y en qué consiste el proceso de biodegradación?
Las urnas biodegradables son contenedores entre 3 y 5 litros aproximadamente, fabricadas con materiales orgánicos. Algunos de estos pueden ser el aserrín, harina de arroz o arcilla, papel reciclado, sal, arena, aglutinantes vegetales y bioplásticos hechos de maíz. Estos materiales, se degradan con el calor del sol, la lluvia, la humedad y diferentes agentes ambientales que intervienen en el proceso, el cual puede llevar entre 6 meses y 2 años.
Las formas y presentación pueden variar. Hay urnas con forma redonda, ovalada, ánforas y jarrones.
Existen urnas cuya estructura permiten plantar un árbol con las cenizas del ser querido como abono. Otros diseños de urnas también comunes, son aquellas que permiten depositar las cenizas para su posterior proceso de integración con la naturaleza, alimentando el suelo y favoreciendo a las plantas del ambiente natural en el que han sido ubicadas.
Este tipo de urnas han transformado el ritual de despedida tradicional y con ello el entorno de los cementerios y/o Centros Memoriales convirtiéndolos en Bosques llenos de vida, reemplazando las lápidas por naturaleza. Las primeras urnas de este tipo, fueron creadas en España cerca del año 1997 y solo hasta el 2002 fueron comercializadas.
Es importante aclarar, que estas solamente están diseñadas para depositar las cenizas después de un proceso de cremación y no es posible, por el momento, depositar restos óseos.
¿Cómo puedo adquirir las urnas biodegradables?
En Prever, ofrecemos alternativas en nuestros Centros Memoriales ubicados en las ciudades de Medellín, Cali, Manizales y Armenia; que con una experiencia innovadora, te permiten generar un vínculo especial con la naturaleza al visitar el lugar donde descansa tu ser querido. Lo anterior, cambiando la percepción del ambiente frío que comúnmente acompaña lugares como el cementerio.
Bosque de Vida en la ciudad de Medellín y Cali, es una de nuestras iniciativas que con el diseño de zonas temáticas llenas de árboles, plantas y hermosas flores, te brindan la posibilidad de depositar las cenizas en una urna biodegradable para su integración con la naturaleza, éstas son: Zona Zen, Ancestral, Renacimiento y Zona Senderos en Cali.
Así mismo, los Árboles Familiares constituyen otra de nuestras propuestas innovadoras en la que un árbol es plantado como símbolo de la unión y fraternidad familiar, rodeado de espacios que contienen las cenizas de los seres queridos que serán parte de ese proceso de transformación de la vida. Estos árboles podrás encontrarlos en Medellín, Manizales y Armenia.
El uso de las urnas ecológicas, es una manera de minimizar el impacto de la huella ecológica (del inglés ecological footprint) que dejamos en el planeta. Igualmente, nos permite añadir un símbolo de vida para rendir homenaje a través de la naturaleza, y reafirmando el compromiso con su cuidado incluso al fallecer.
Huella ecológica: indicador que mide la sostenibilidad para conocer el impacto de la actividad humana sobre el entorno.